El
Atlético de Madrid jugará la final de la Copa tras empatar en el Sánchez
Pizjuan a dos en una vuelta de la semifinal que sentenció en la primera parte
con goles de Diego Costa y Falcao, lo que también le valió para saldar una
deuda que tenía pendiente desde 2010, cuando el Sevilla le quitó el título en el
Camp Nou.
El brasileño y el colombiano demostraron su gran calidad y dieron dos zarpazos
definitivos ante un rival que no bajó los brazos pero que en la segunda parte
se desfondó y que además acabó en inferioridad por la expulsión por doble
amarilla del centrocampista chileno Gary Medel, quien dejó el terreno en el
minuto 76, y del francés Geoffrey Kondogbia, quien vio la roja directa en el
92.
Estuvo claro en el inicio que no era un partido más, el premio era jugar una
final y los dos equipos salieron con alto ritmo y con el balón de una a otra
área, pero fue el madrileño el que muy pronto logró uno de sus objetivos,
marcar como visitante y contrarrestar así el gol que Álvaro Negredo logró en el
Vicente Calderón en la ida.
Fue Diego Costa, que también hizo los dos de los suyos en la ida para dejar el
partido entonces en un 2-1, el que no desaprovechó la primera ocasión de que
dispuso en el Sánchez Pizjuán y se fabricó un tanto a la media vuelta entre la
defensa local con el que le puso el balón imposible, cruzado, por bajo y pegado
a un poste, al meta portugués Antonio Alberto Bastos 'Beto'.
No se había cumplido el minuto seis y el equipo del argentino Diego Pablo
Simeone jugó a favor de corriente porque el Sevilla debía marcar dos goles para
igualar la eliminatoria y los atléticos controlaron en la defensa a la espera
de encontrar en un despiste local al delantero Radamel Falcao o al propio Diego
Costa.
La formación de Unai Emery, por su parte, salió con rapidez de la primera línea
de presión que opuso el rival pero se encontró después con otras dos muy juntas
por delante del meta belga Thibaut Courtois que fueron imposibles de superar.
Además, el Atlético de Madrid, en un contragolpe de manual iniciado por Diego
Costa y culminado a la perfección por el goleador colombiano, puso el 0-2 al
borde de la media hora y obligaba a los locales a marcar cuatro goles para
superar la eliminatoria.
Pese a ello, los sevillistas quisieron demostrarle a sus enfervorizados
aficionados que por ellos no iba a quedar y Jesús Navas se sacó un derechazo
espectacular con el que puso el 1-2 en el minuto 39, su primer tanto de la
temporada, al que siguió un remate de cabeza con peligro del croata Iván
Rakitic en los mejores minutos del equipo andaluz.
En la segunda parte los locales no tuvieron más remedio que irse a por todas
ante un Atlético sin prisas, con muchos hombres atrás pero con dos estiletes
delante que siempre presagiaban peligro, con lo que Manu del Moral, que había
ingresado en lugar de José Antonio Reyes, Rakitic y Negredo tuvieron sus
opciones de marcar en los primeros minutos, y también Diego Costa y Falcao para
los visitantes.
Jesús Navas fue un verdadero quebradero de cabeza para sus adversarios, pero el
tanto sevillista no llegaba y el milagro cada vez se presumía más imposible
ante en Atlético con muchos recursos y que además vio cómo el rival jugó en
inferioridad numérica en el tramo final del choque al ver Medel dos amarillas
en el mismo lance y después Kondogbia roja directa, pero no pudo impedir que el
Sevilla empatara en la prolongación con un tanto de Rakitic.
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